Quizá nadie haya personificado la figura del poeta romántico como George Gordon Byron (1788-1824), sexto barón de Byron, cuya singular y repentina celebridad surcó el firmamento cultural europeo como un cometa. Su linaje aristocrático, su tumultuosa vida en Londres y en Venecia, sus simpatías revolucionarias y su temprana muerte en Grecia sellaron la identificación del autor con unos personajes -C...