Los diarios de Gregorio Martín de Guijo y Antonio de Robles son una rareza ineludible en la historia de nuestra expresión literaria. Primero porque hay pocos que retratan lo que fue la vida en la capital del virreinato de la Nueva España, y segundo, por las voces ahí reunidas. Son páginas en las que ya asoma el temperamento del tiempo de la Ilustración. Guijo consignó en las páginas de su diario u...