El impresionante debut de Conan en Dark Horse fue uno de los mayores eventos de la industria del cómic en 2004. El guionista Kurt Busiek, que trajo una perspectiva fresca y novedosa al género superheróico con obras como Marvels y Astro City, se unió al reputado dibujante Cary Nord en una serie que no tardaría en ser aclamada y recomendada por lectores y crítica por igual.