De todos los perros de defensa, el rottweiler es el más fuerte y, si se sabe educar y adiestrar, el más seguro. Mucha gente está convencida de que el rottweiler es un perro peligroso, que muerde con facilidad y que resulta difícil de controlar. Sin embargo, el perro «malvado» no existe: desde que nace, el hombre puede modificar su instinto, corrigiendo las conductas agresivas y combativas, y estab...