No es sabia la mujer que tiene muchos conocimientos, si no aquella que los sabe utilizar de manera positiva, y en el transcurso de nuestra historia no ha existido ser más sabio que las brujas: mujeres amorosas, que no temían que su voz fuera escuchada, que cuidaban a quienes amaban pero sin ser sometidas. Ahora, en medio de este agitado mundo, parece que las mujeres hemos perdido esos atributos, h...