Mónica se prometió que nunca volvería Dublín, pero, después de once años viviendo en España, las circunstancias la obligarán a regresar a su ciudad natal. Y aunque su intención es pasar allí una cortísima temporada, acabará instalándose en la casa de su estricta y liante abuela, donde compartirá techo con Connor O'Callaghan. ¡El mismo chico que le hizo la vida imposible los últimos años que vivió ...