Contrario a lo que su nombre sugiere, este archivo no pretende expiar nuestras culpas nacionales, ni purificarnos de algún mal. Es, en cambio, el reverso exacto de lo que propone la prensa y su búsqueda perpetua de actualidad: volver a leer los archivos del pasado para descubrir que las historias no tienen fecha de caducidad.
Iluminados por la luz que proyecta el tiempo, a través de un delicado pr...