Los tentáculos de la gentrificación están expandiéndose por el Oost: por todas partes surgen cafés, boutiques, panaderías, restaurantes y hoteles modernos. Pero sigue siendo una zona llena de vitalidad y vida de barrio, y un lugar en el que conviven muchos colectivos diferentes. Esto se evidencia especialmente en el Dappermarkt: entre los puestos de ropa interior se ven mujeres con velo empujando ...