Aileen siempre tuvo ganas de asesinar y su instinto la llevó a vivir en un parásito que parecía pedirle a gritos un desahogo. Mientras tanto, le basta con dejar que los personajes de sus novelas maten y piensen en matar, pues en su mundo todo está permitido. "Quienes lean esta novela sabrán si Aileen se atrevió o no, pero también tendrán conocimiento de algo mucho más importante: no es la muerte, ...
Aileen siempre tuvo ganas de asesinar y su instinto la llevó a vivir en un parásito que parecía pedirle a gritos un desahogo. Mientras tanto, le basta con dejar que los personajes de sus novelas maten y piensen en matar, pues en su mundo todo está permitido. "Quienes lean esta novela sabrán si Aileen se atrevió o no, pero también tendrán conocimiento de algo mucho más importante: no es la muerte, ...