Francia, 1851.
La vida de Sophie Delacroix, una delicada e ingenua joven huérfana de madre, nunca ha sido perfecta. Su padre, cuya ojeriza le manifiesta desde su nacimiento, culpándola de la muerte de su madre, la somete reiteradamente a sus exigencias, como la de presentarla en sociedad al cumplir los diecisiete años con el único propósito de conseguir para ella un título nobiliario.
Como si de ...